Inició el programa de reciclaje de PET en la colonia Mirador de la Cumbre II y colonias aledañas, a cargo del Voluntariado de la Universidad de Colima, con el objetivo de promover el desarrollo de hábitos y conductas respetuosas con el medio ambiente.

Cristina Torres explicó que es posible evitar la acumulación y contaminación de calles, alcantarillas, drenajes y ríos así como educar a un ciudadano responsable mediante este programa.

También es factible reducir el volumen de basura, lograr beneficios materiales y en especie para participantes y comunidad.

Comentó que este proyecto, iniciado desde el mes de octubre, quiere integrar a toda la comunidad y pretende generar conciencia en el uso de energía y agua, así como su relación con la salud y cambio climático.

La fortaleza de este proyecto radica en la suma de esfuerzos y voluntades de toda la comunidad para cuidar el ambiente y disminuir el impacto negativo, dijo.

Para sensibilizar a los habitantes de estas colonias se buscó a una asociación acopiadora de PET que participa actualmente con otros municipios que realizan la misma actividad. Agregó que cada plática aborda el impacto al ambiente y su relación con la salud, pues ambos son parte de un mismo sistema.

Este proyecto trabaja para hacer del ambiente una comunidad respetuosa del entorno natural y responsable con el aprovechamiento de sus recursos, comprometido con el fomento de hábitos saludables.

Rocío González Saucedo, responsable del programa, explicó que modificar los hábitos de consumo, disminuyendo el volumen de residuos que se generan, es fundamental en la lucha contra el cambio climático.

Dijo, además, que ésta es una de las acciones que cada persona puede llevar a cabo. Por ello, una de las formas de contribuir con la salud y cuidado del ambiente es reduciendo el consumo de papel, de productos con mucho empaque y de envases.