El rumbo de la educación superior en México fue uno de los temas centrales que se discutieron en el Segundo Foro de Investigación en Educación (FIE 2012) que concluyó el pasado viernes en la Universidad de Colima. Organizaron este foro (6 al 8 de junio) la Universidad de Colima a través de su Secretaría de Investigación, en coordinación con la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), el Instituto Superior de Educación Normal de Colima (ISENCO), Fomento Cultural de Colima (A.C.), la delegación Colima de la Asociación Nacional de Profesores de Matemáticas (ANPM) y la Fundación para la Investigación Sobre el Aprendizaje (FISA, A.C.). En el panel participaron con sus diversos enfoques María Guadalupe Preciado Brizuela, profesora de preescolar con 15 años de servicio y reconocida recientemente con el premio Ignacio Manuel Altamirano al mejor desempeño de la carrera magisterial en Colima; el secretario Académico de la Universidad de Colima, Juan Carlos Yáñez Velazco y el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad de Colima (SUTUC), Leonardo César Gutiérrez Chávez. La dinámica del panel fue dirigida por el secretario de Investigación de la UdeC, Ricardo Antonio Navarro Polanco, quien inició con un planteamiento a la profesora Preciado Brizuela acerca de la razón y la solución al 70 por ciento de los egresados de la escuela normal que son rechazados porque no pasan el examen para ser maestros. María Guadalupe, autora del libro Placer de aprender -la alegría de enseñar-, dijo que la solución es multifactorial y particular en cada estado. Una solución es el cambio de visión que ahora el ISENCO tiene que aprender ante la serie de retos (normatividades, infraestructura y equipamiento) por ser una escuela de educación superior, “aunado a esto, al oficio para lo cual nosotros laboramos, la educación básica del país”. Para Leonardo Gutiérrez, el planteamiento fue referido a la carga de ser un sindicato de universitarios únicamente. ¿Son un lastre o un impulso a la educación superior en el país? fue la pregunta. El secretario del SUTUC respondió que son impulsores de la educación, definitivamente pero –dijo- hay de sindicatos a sindicatos. Estas organizaciones, para el líder sindical, tienen la autonomía y las instancias para modificar todas las vertientes de los organismos sindicales y señaló que como SUTUC “queremos la mejor formación y capacitación reflejada en los estudiantes. Si vamos a hacer una reforma también vamos a pensar en la capacitación, es un documento rector, con sus antecedentes y metodologías, sobre todo de países del primer mundo”, refirió. En la última y abundante participación, Yáñez Velazco compartió una gráfica dividida en dos grandes bloques, el primero de ellos con los aspectos a los cuales el país no puede darles la vuelta, y el segundo con las pistas para construir un sistema educativo con otro rostro. Entre lo primero, enlistó el derecho a la educación, el financiamiento, la educación no vista como política de estado y la obligación de que las universidades intervengan en el sistema educativo nacional. Como las pistas para delinear el otro rostro, Yáñez pidió un sistema educativo desde su inserción en el mundo y la necesidad de triangular la educación superior privada. También habló de la necesidad de crear de una Ley Nacional de Educación Superior que regule entre otras cosas las condiciones para abrir una institución educativa, y destacó resolver también esa percepción de la educación como una mercancía, así como el problema de los “ninis”. “Si no resolvemos el conjunto de estos problemas difícilmente podremos hacer del salón de clases un desafío, y seguirá siendo una canción de cuna”, -dijo al citar a Paulo Freire en su metáfora sobre lo que debe ser un aula. Sobre el cuestionamiento del panel en el tema de las competencias en la Universidad de Colima. El pedagogo respondió que no son precisamente estas las apremiantes, sino por su experiencia sugiere seguir las recetas freirianas donde los profesores tenemos –dijo- que aprender cuál es la emoción de enseñar con alegría. “Si es con un método tradicional seguro funciona, porque hay maestros que deseamos nunca se callen en clase”. |