El Voluntariado de la Universidad de Colima, junto con el Comité Interinstitucional para la Atención a Víctimas de Trata, ofrecieron el pasado lunes y martes una charla informativa sobre la trata de personas y las políticas que se están desarrollando en el país para prevenirla y erradicarla. El encuentro estuvo destinado a la comunidad universitaria durante la entrega mensual de despensas. Con el apoyo de un video, se muestra que la trata de personas es un fenómeno global: más de 130 países han reportado casos. Es una de las actividades ilegales más lucrativas, después del tráfico de drogas y de armas. De acuerdo con estimaciones de las Naciones Unidas, más de 2.4 millones de personas están siendo explotadas actualmente como víctimas de la trata de personas, ya sea para uso sexual o laboral. Otras formas de trata de personas incluyen la servidumbre, el tráfico de órganos y la explotación de niños para la mendicidad o bien la guerra. Hasta un 80 por ciento de las víctimas de la trata de personas son mujeres y niñas. En México, la trata y explotación de personas reporta ganancias millonarias a las bandas de traficantes. Además, entre 16 y 20 mil niños y niñas son explotados sexualmente y nuestro país es el segundo en el mundo que más víctimas de trata de personas provee a Estados Unidos. La trata de personas se define como la captación de personas recurriendo al uso de la fuerza o rapto, fraude, abuso de poder y engaño, con fines de explotación, y se le conoce como la esclavitud del siglo XXI. Según lo expuesto en el video informativo, si una persona es obligada por otra a cometer un acto en contra de su voluntad o se le exige realizar un trabajo forzado o tráfico de drogas, está siendo víctima de la trata de personas. La dispersión de este delito se debe a que genera millones de dólares en el mundo, y es el segundo más redituable después de la venta de drogas; incluso supera la venta de armas. La Organización Internacional para Migraciones estima que en el mundo cada año un millón de personas (entre mujeres, niños y hombres) son vendidas para ser sometidos a la esclavitud. En México, las mujeres, niños personas indígenas y migrantes indocumentadas son las principales víctimas de este delito. Las víctimas son contactadas por medio de anuncios en internet, e incluso por familiares a través del engaño y el secuestro. En 2007 entró en vigor la ley para prevenir y sancionar la trata de personas. A quien incurra en este delito se le sancionará de 6 a 12 años de prisión y con 9 a 18 años si el delito es cometido en contra de un menor o una persona que no tenga capacidad para comprender el significado del hecho. Colima es ya uno de los 19 estados de la república que han reformado sus códigos penales, a partir de la ratificación de los mismos, para prevenir la trata de personas, por lo que castiga con 10 y hasta 20 años de prisión a quien someta a una persona para cualquier forma de explotación. En el estado son más de sesenta instituciones las que participan en un comité interinstitucional para la atención a víctimas de este delito. Entre las recomendaciones para no ser víctima se sugiere no entregar información personal ni familiar a desconocidos, no acudir solo a una cita de trabajo si se tienen dudas de los requisitos, desconfiar de las personas que ofrezcan mucho dinero por realizar un trabajo, cuidar la información que se comparte en las redes sociales, y al viajar se sugiere dar informes a familiares del lugar de destino y con quien estará. El video fue realizado por la Universidad de Colima con la participación de la oficina de enlace y participación ciudadana de la Policía Federal, el DIF Estatal Colima, la delegación Colima de la PGR y el Instituto Colimense de las Mujeres. |