Hoy a las 17:00 horas en el Teatro Universitario

Olga Krauss Torres, profesora-investigadora de la Universidad de Colima, abordará el tema de secretos industriales en el Tercer Congreso Internacional de Derecho y Tecnología, este jueves 13 de noviembre, a las 17:00 horas, en el Teatro Universitario.

Krauss Torres explicó que los secretos industriales no se protegen mediante patentes; sin embargo, “el Instituto Mexicano de Propiedad Industrial los resguarda, pues hacen referencia a los procedimientos que siguen las empresas para un producto cuyo procedimiento de elaboración no se quiere divulgar, por lo que se les pide a los trabajadores firmar un contrato de confidencialidad”, explicó.

En entrevista, dijo que la Universidad de Colima es de las primeras en el país en proteger la “creación inventiva e intelectual” de sus miembros mediante la propiedad intelectual. “Hasta en noviembre de este año se tienen registradas siete patentes, doscientas licencias para derechos de autor y tres modelos de utilidad”.

Las patentes, explicó, tienen una vigencia de 20 años, después de lo cual aquello que protegen es de dominio público, lo que implica que otros investigadores pueden hacer cambios. Por otro lado, los derechos de autor se aplican a documentos como artículos de investigación, poesía, revistas, etc., y los modelos de utilidad corresponden a las innovaciones de alguna herramienta o fórmula que ya existía.

Dijo que es importante que los investigadores y estudiantes conozcan lo que realiza el Departamento de Propiedad Industrial de la Universidad de Colima, “porque piensan que sus investigaciones forman parte de un proyecto; sin embargo, pueden obtener patentes”. Por lo anterior, invitó a los universitarios a conocer los procesos para el registro de su invento.

“Nosotros salvaguardamos lo que hacen los universitarios y es importante que se enteren que existe un departamento con esa función; además, su trabajo es muy valioso, por lo cual es importe motivarlos a que lo registren”, dijo.

Por último, dijo que la UdeC fue la primera en tener un programa de propiedad intelectual y establecerlo como materia. “Nosotros protegemos todo lo que hacen los universitarios; el público en general también puede venir, pero sólo le brindamos asesoría”, agregó.