La entrega de constancias del Centro Nacional de Evaluación (CENEVAL) a los egresados de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME) de la Universidad de Colima, “es tan significativa como un acto de rendición de cuentas a la sociedad, pues con ella entregamos a los jóvenes que nos confiaron para su preparación y formación integral”, dijo el delegado del campus Coquimatlán, Gerardo Cerrato Oseguera, en representación del rector Miguel Ángel Aguayo López, al celebrar 30 años de vida de esta facultad.

En el auditorio de la FIME, Cerrato Oseguera mencionó la importancia de resaltar la tarea transformadora de nuestra casa de estudios, “pues considero –dijo- que es vital que los jóvenes estudien, pero se debe elevar la consideración del trabajo de los egresados en la sociedad”.

En este evento, el funcionario universitario estuvo acompañado por el director de la FIME, José Luis Álvarez Flores, por directivos, administrativos, coordinadores académicos, estudiantes y personal del plantel, quienes atestiguaron este acto de entrega de constancias a 30 egresados examinados y evaluados por el CENEVAL.

Al momento de su intervención, José Luis Álvarez dijo confiar plenamente en el desempeño de los nuevos profesionistas, “y esperamos que pongan en alto el nombre de Colima para orgullo de nuestra facultad y de toda nuestra Universidad. Ello nos motivará a seguir trabajando para que nuestros programas educativos sean de calidad y que respondan a las necesidades sociales, productivas y económicas de la región”.

Por su parte, Carlos Escobar del Pozo, profesor investigador de ese plantel, dijo a los nuevos egresados: “Hoy comienzan muchos nuevos retos, y me voy a atrever a pedirles que siempre recuerden que antes que ser ingenieros, antes de los cálculos, diseños y sistemas de potencia, son personas con nombre propio, y que por tener un título no valen más ni les hace ser mejores que otras personas; esta condición les exige tratar como iguales a los demás”.

Antes de culminar su participación, Carlos Escobar pidió a los recién egresados que “no olviden que como ingenieros no sólo debemos generar riqueza, sino que, desde nuestra perspectiva, ahora y siempre debemos generar bienestar”.

Bajo este mismo tono, el egresado Emmanuel Guerra Sandoval dedicó sus palabras a sus condiscípulos y ahora colegas, y les conminó a no perseguir un éxito personal, sino “a trazar una línea que nos permita ser buenos ingenieros, y así el éxito nos perseguirá, y lograremos tener un éxito comprometido con las buenas causas sociales”.