* Modifican conductas para evitar enfermedades cardiovasculares, cáncer, alteraciones respiratorias y diabetes En el marco de la Estrategia Colima para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes, la Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado realiza distintas actividades con sus trabajadores en los entornos laborales de diversas áreas, a fin de prevenir las enfermedades crónicas no transmisibles. El Departamento de Enfermedades Crónicas y Envejecimiento de la Secretaría de Salud estatal indicó que se imparten sesiones educativas sobre nutrición y alimentación a los trabajadores, para aumentar el conocimiento en este aspecto y propiciar una mejor cultura en materia de salud alimentaria. Hasta la fecha, se han impartido 17 pláticas con cuatro diferentes temáticas, a las cuales han asistido más de 150 trabajadores. Así mismo, indicó que se efectúan mediciones de peso y de circunferencia de cintura, así como detecciones capilares de colesterol total, triglicéridos y glucosa con el fin de identificar al personal en riesgo. Refirió que seguirán realizándose estas acciones de prevención y detección con el fin de que al término del presente año, los trabajadores logren mejorar su calidad de vida con cambios en sus hábitos alimenticios, y quienes presenten sobrepeso u obesidad, tengan una pérdida de peso del tres por ciento del peso total o una pérdida de dos centímetros de cintura. De la misma manera, señaló que el consumo de tabaco, la inactividad física, las dietas malsanas y el uso nocivo del alcohol aumentan el riesgo de las enfermedades crónicas no transmisibles o las causa de manera directa, conductas que se pueden modificar para prevenir los padecimientos cardiovasculares, el cáncer, las alteraciones respiratorias crónicas y la diabetes. El Departamento de Enfermedades Crónicas y Envejecimiento mencionó que los infartos de miocardio o accidentes cerebro-vasculares; el cáncer; la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y el asma, y la diabetes, son padecimientos que constituyen los cuatro grupos principales de las enfermedades no transmisibles que suelen asociar a los grupos de edad más avanzada, aunque también se producen cada vez más en personas menores de 60 años de edad. Añadió que los comportamientos citados propician cuatro cambios metabólicos-fisiológicos claves que aumentan el riesgo de dichos padecimientos: hipertensión arterial, sobrepeso y obesidad, hiperglucemia (niveles elevados de glucosa en sangre) e hiperlipidemia (niveles altos de lípidos en la sangre). |