*Se trata del programa Jugando a sanarte que ofrece actividades pedagógicas, lúdicas, artísticas, terapéuticas y de acompañamiento emocional a niños hospitalizados El programa multidisciplinario de apoyo psicopedagógico a niños hospitalizados, Jugando a sanarte, implementado desde hace 10 años por la Facultad de Psicología de la Universidad de Colima, resultó ganador en la categoría de docente colectivo del área grupos vulnerables, por reunir a diferentes áreas del conocimiento e impactar en un sector poco visible como son los hospitales. Este Premio Nacional de Servicio Social 2012, de la Comisión Interuniversitaria de la misma área (CISS) fue otorgado en el marco del 29 Congreso Nacional y 3er. Internacional de Servicio Social realizado del 23 al 26 de octubre en la Universidad Autónoma de Sinaloa, en la ciudad de Mazatlán. En entrevista, las profesoras investigadoras de la Facultad de Psicología Verónica Guzmán Sandoval y Fabiola Rojas Larios describieron la importancia del reconocimiento que las universidades mexicanas, adheridas al CISS, hicieron a su programa “Jugando a sanarte”. “Este programa tiene su esencia en la labor altruista y visionaria de estudiantes y maestros de la Facultad de Psicología y del Instituto Universitario de Bellas Artes (IUBA), con el apoyo del personal clínico del Hospital Regional Universitario (HRU) y el HGZ No. 1 del IMSS. El enfoque multidisciplinario del programa involucra a asesores en diferentes áreas del conocimiento, entre ellos María Esther Hernández Ramírez, (clínica) Fabiola Rojas Larios (pedagógica), Verónica Guzmán Sandoval (coordinadora del proyecto), Juana de la Luz Castellanos Morfín, (clínica en el HRU), Jorge Torres Hernández (terapéutico), y Davide Nicolini Pimazzoni (artístico). Verónica Guzmán explicó que Jugando a sanarte consiste en actividades pedagógicas, lúdicas, artísticas y terapéuticas y de acompañamiento emocional que se les ofrece a los niños hospitalizados y sus acompañantes que casi siempre son sus madres. Atiende todas las áreas de pediatría sin discriminación alguna y a todas las edades, desde el nacimiento hasta la adolescencia. Explicó Guzmán que el trabajo ha evolucionado y desde hace dos años trabajan con musicoterapia a cargo de Davide Nicolini y en la parte terapéutica se incorpora una historia con relación a la vivencia de hospitalización del niño y la mamá. “La experiencia impacta en el estado de ánimo de los niños, disminuye el estrés de las mamás y modifica la armonía en las habitaciones” apuntó la doctora Verónica Guzmán. Con los niños en edad escolar utilizan terapia narrativa y la metáfora, con los adolescentes también la terapia narrativa pero adecuada a su contexto y crecimiento. Fabiola Rojas, coordinadora del programa invitó a interesarse en el pensamiento comunitario, en la actitud de brindar afecto y atención como un ejercicio de reciprocidad, es decir, pensar y actuar de manera colectiva. Esta es la esencia del programa –señaló la doctora Rojas Larios– y pidió que se formalice la cooperación entre las dependencias universitarias que participan para tener un trabajo de mayor impacto y trabajar en armonía con los objetivos. |